10 ACTORES QUE SALTARON A LA FAMA POR ACCIDENTE

En el cine Hollywood se encuentran muchos aspirantes a actores que sueñan con una oportunidad, pero son pocos los que la consiguen. y a otros la ocasión de mostrar su talento les llega de suerte. 

Por Emilio Soto / @emigol_11

06/04/2021

Entrar en el mundo de la actuación, sobre todo si hablamos del cine hollywoodense, debe ser una de las profesiones más difíciles de conseguir. Muchos lo intentan, pero pocos tienen éxito. Y hay otros que sin buscarlo  llegaron a la fama por esas vueltas que da la vida. Estos son 10 ejemplos súper claros de grandes estrellas que las casualidades los llevaron a lo más alto.

Harrison Ford

El otrora protagonista de “Indiana Jones”  y la trilogía original de “Star Wars”, intentó de joven convertirse en actor, pero las oportunidades que conseguía no lo tenían contento. Casado y padre de dos hijos, debía buscar una segunda profesión para pagar cuentas. Así es que se convirtió en carpintero. Un día, mientras instalaba una puerta en la oficina de Francis Ford Coppola, llegó George Lucas, quien estaba utilzando las oficinas de Coppola mientras preparaba su próxima película: La Guerra de la galaxias. George habló con él, porque se conocían. Ford había tenido un papel pequeño en American Graffiti, a las órdenes de Lucas. Fue entonces que lo llamaron para que ayudara a la producción, leyendo partes de diálogo con los actores que estaban audicionando. “Leí con más de cien actores. Seleccionaron a algunos y, de repente, me propusieron que hiciese yo también la prueba. Y me eligieron. Me preguntaron si quería hacerlo y respondí: ‘Claro, ¿por qué no?”, ha contado el actor en alguna oportunidad. El resto es historia. 

Marilyn Monroe

La historia de una de las leyendas eróticas más grandes del cine, es del todo curiosa. Norma Jean, nombrada así por su madre como homenaje a la actriz de cine mudo Norma Talmadge, fue dada en adopción, apenas a seis semanas de haber nacido. Gran parte de su infancia la pasó entre casas de familias adoptivas y orfanatos. A los 16 se casó con James Dougherty, trabajador de una fábrica de material aeronáutico, donde Marilyn también trabajó revisando paracaídas. Estaba terminando la Segunda Guerra Mundial, cuando un día llegó a la fábrica un fotógrafo que quería retratar el trabajo de las mujeres en tiempos de guerra. El reportaje fue publicado en la revista Yank, que se fijó en ella de inmediato y le propuso posar como modelo. No demoró en saltar a la fama y en 1945, ya era conocida como “el sueño de los fotógrafos”. Apareció en 33 portadas de revistas nacionales. Llegar a Hollywood fue un mero trámite. 

Jason Statham

Mucho antes de convertirse en la mega estrella de taquilleras películas de acción como ‘Snatch: cerdos y diamantes’, ‘Revolver’ o las sagas ‘Transporter’, ‘The Expendables’ y ‘Fast & Furious’, Jason Statham se curtió en otros oficios igual de honrosos, aunque ciertamente menos lucrativos: Fue bailarín de videos musicales, modelo, deportista olímpico con el equipo británico de saltos ornamentales y hasta vendedor de perfumes y joyas en el mercado negro. Fue justamente este último el que lo llevaría a la fama. Tenía 31 años cuando conoció al director Guy Ritchie, quien buscaba en la calle a los protagonistas de su primer largometraje “Juegos, trampas y dos armas humeantes” (1998). Uno de los papeles del film era el de un estafador/vendedor callejero y adivinen a quién seleccionaron. “Cuando me propuso estar en su película, eso fue todo. Ese día me convertí en actor”, ha reconocido Statham.

Charlize Theron

Una durísima infancia y adolescencia en su natal Sudáfrica llevaron a un jovencísima Charlize Theron a escapar primero a Nueva York para perseguir su sueño como bailarina y luego a Los Angeles, cuando aquello acabó mal. Fue allí, específicamente en la sucursal de un banco, cuando con su casi metro ochenta de estatura comenzó a  montar un escándalo porque no le dejaban cobrar un cheque de 500 dólares que su madre le había dado. El gerente del banco no suponía que la clienta en cuestión estaba destinada a convertirse en una de las mayores estrellas de Hollywood. Pero en ese mismo banco sí había alguien que supo ver que el ímpetu y la desesperación de Charlize Theron tenían madera de estrella. Tras abandonar el banco, el hombre, que era un representante de actores, le dio su tarjeta y se ofreció a buscarle trabajo. Por un par de años hizo muchos papeles, aunque de baja categoría, hasta que despidió a aquel hombre del banco, apareció en un comercial de Martini y muy pronto vino “Monster”, la película que la puso en lo más alto de Hollywood, logrando incluso el Oscar a la mejor actriz por su espectacular interpretación. 

Will Smith

Siendo aún bastante joven y sin ninguna relación con el mundo de la actuación, Will Smith sí pertenecía al mundo del espectáculo. Empezó trabajando como maestro de ceremonias junto a su amigo Jeffrey Townes en el grupo Dj Jazzy Jeff & The Fresh Prince. Pero muy pronto la banda logró alcanzar el estrellato y con el disco Parents Just Don’t Understand ganaron en 1989 el primer Grammy rap de la historia. Grabaron más discos, hasta que la banda se deshizo y Will continuó como solista. En 1990, cuando ya era un rapero bastante escuchado en las radios, la cadena de televisión NBC lo contrató para realizar uno de los personajes más recordados por todos sus fans: el príncipe de Bel Air, producida por Warner. La leyenda cuenta que un día Will estaba en un estacionamiento cuando un hombre se le acercó para preguntarle por una dirección. El hombre en cuestión era Benny Medina, vicepresidente de Warner Brothers, quien al reconocerlo, lo habría invitado a participar de la película. 

Jennifer Lawrence

La protagonista de la saga de “Juegos del Hambre”, J. Law, como la llaman sus amistades, creció montando a caballo y jugando deportes en los equipos masculinos de su colegio en Kentucky. De pequeña amó la actuación y pasó su niñez haciendo montajes musicales caseros para su padre y actuando en las obras de su iglesia. A los 14 años mientras paseaba con su familia en Manhattan, un agente de modelos le pidió tomarle una fotografía y algún número de contacto. Solo tomó un par de horas para que el teléfono de su madre recibiera la llamada que sin dudarlo cambiaría la vida de la pequeña que pensaba que jamás encontraría su vocación. Fichó con la agencia con la única condición de que la dejaran audicionar para actuar. Su primera prueba de pantalla fue para “The Bill Engvall Show”, su primera experiencia en actuación. Un par de experiencias más y  ya era considerada para dos de las franquicias más taquilleras del cine, “X-Men” y “The Hunger Games. Cabe destacar que en el 2013, a los 22 años, logró su primer Oscar tras imponerse como mejor actriz en la 85 edición de los premios de la Academia de Hollywood gracias a su trabajo en “Silver Linings Playbook”.

Channing Tatum

Criado en la soleada Florida, Channing se destacaba ya en su adolescencia más por sus cualidades físicas y deportivas que por sus calificaciones escolares. En realidad lo tenía todo para ser una estrella del fútbol americano, pero sus indisciplinas fueron las culpables de su expulsión de la Universidad de West Virginia en 1999, donde entró justamente gracias a una beca para jugar este deporte. Volvió a Miami decidido a salir adelante y después de probar suerte en todo tipo de trabajos, desde reparador de techos hasta stripper, consiguió un pequeño papel como bailarín en el videoclip “She bangs” de Ricky Martin. Probó suerte como modelo y le fue tan bien que en 2004 le ofrecieron un pequeño papel en la serie “CSI: Miami”. La experiencia le gustó tanto que decidió volcarse de lleno en el mundo de la interpretación.

Eva Mendes

La actriz estadounidense, de origen cubano, ha recordado en varios momentos sus duros comienzos. “Trabajé de todo antes de ser actriz. Vendí ‘hot-dogs’, perritos calientes en verano, y eso lo odiaba. Vendí ropa, maquillaje, pizzas…. Siempre quise ser independiente. Quería dinero propio y mi mami me puso a trabajar. Por la mañana iba a la escuela, y por la tarde al centro comercial hasta las 9. Y estaba contentísima”. Pero, sin duda, Eva estaba para grandes cosas. Gracias a un vecino que era fotógrafo, Eva pudo llegar al estrellato. Siempre que podía ayudaba a su amigo posando para sus fotografías, y estas terminaron en un agencia de modelos y fueron vistas por un cazatalentos que finalmente la fichó para la gran pantalla.     

Johnny Depp

Johnny Deep creció en Florida y era un chico solitario que pasaba gran parte de su tiempo tocando la guitarra en un grupo llamado “The Kids”, banda de rock que llegó a telonear a Iggy Pop. A los 17 abandonó a su familia y se fue Los Angeles donde trabajó como obrero de la construcción mientras intentaba seguir con su carrera musical. A los 20 se casó con la maquilladora Lori Anne Allison, de quien se terminó divorciando en 1985. Pero fue ella quien le presentó a Nicolas Cage, con quien inició una estrecha amistad y el encargado de convencerlo para que se presentara al casting que le llevó a debutar en el cine con la película de terror dirigida por Wes Craven, “Pesadilla En Elm Street” (1984).

Pamela Anderson

Si de casualidades se trata, el salto a la fama de esta modelo y actriz canadiense con ascendencias finlandesas y rusas, sí que lo fue.  Nunca imaginó que la asistencia a un partido de fútbol americano la llevaría posteriormente al estrellato. Ese día Pamela lucía una provocativa camiseta ceñida con la marca de cerveza Labatt. El productor televisivo del partido le hizo un zoom en la pantalla gigante del estadio, originando una excitación entre el público masculino que provocó que Pamela fuese invitada a bajar al césped. Poco después, la propia empresa Labatt la utilizó como imagen publicitaria. De ello a ser portada de la revista Playboy en 1990 fue instantáneo. Pero sin duda su ascenso a la popularidad internacional se produjo en 1992, cuando comenzó a aparecer en Los Guardianes de la Bahía (1992-1997), serie televisiva en la que interpretó el personaje de C. J. Parker causando sensación por su físico exuberante.

clear
TOP