La analogía del café para mejorar tu vida sexual

En la búsqueda de una vida sexual más plena, a menudo nos enfrentamos a la dificultad de expresar nuestros deseos y necesidades en la intimidad. ¿Cómo podemos mejorar nuestras experiencias íntimas si cada encuentro es único y cada pareja diferente?

Por Francisca Vives K.

Un terapeuta sexual australiana ha concebido una analogía que podría iluminar este camino hacia la satisfacción sexual. La comparación con el acto de pedir un café en una cafetería puede resultar reveladora.

Imagina entrar a una cafetería y simplemente decir “quiero un café”. Es poco probable que obtengas exactamente lo que deseas. Del mismo modo, en el ámbito sexual, si no comunicas tus preferencias y deseos, es posible que no obtengas la experiencia que anhelas.

La clave está en ser específico. Al igual que en la cafetería, donde puedes solicitar un capuchino de almendras con leche sin lactosa y con eldulzante, en el dormitorio es vital expresar claramente tus deseos para obtener la experiencia deseada.

Entonces, ¿cómo puedes aprender a comunicar lo que deseas durante el sexo? La terapeuta sexual da algunos consejos. 

1. Descubre tu propio lenguaje sexual. Reflexiona sobre las palabras que te resultan cómodas al hablar sobre sexo y tu cuerpo. Practica diciéndolas en voz alta para familiarizarte con ellas.

2. Describe tus pensamientos, deseos y acciones eróticas de manera sugerente y sensual. Comienza con pensamientos eróticos o fantasías y compártelos con tu pareja de una manera íntima y emocionante.

3. Conoce tus propios deseos y necesidades sexuales. Investiga y explora tu propia sexualidad para entender lo que realmente te excita y te satisface.

4. Utiliza un sistema de semáforo para establecer límites y consentimiento claro. Elige colores que representen tu disposición: rojo para lo prohibido, naranja para la apertura a discutir y verde para el entusiasmo total.

Al final, la comunicación clara y abierta en la intimidad es esencial para una vida sexual plena y satisfactoria. Aprender a pedir lo que deseas puede transformar tus encuentros íntimos y llevarlos a nuevos niveles de conexión y placer.

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