Micro manicura francesa

Llega el nail art más minimalista. Pequeñas sonrisas perfilan las uñas este otoño. Y así es como se hacen.

Por Francisca Vives K. / @franvivesk. Fotos: Instagram

La evolución contemporánea de la icónica manicura francesa -la que tiene una delgada línea blanca- es la micro manicura francesa. Se trata de una versión minimalista del nail art más popular de todos los tiempos, inventado en California en los años 70 y que se hizo famoso en Francia en los desfiles de París unos años después. Creado por Jeff Pink, fundador de la marca Orly, para combinar las uñas de las actrices americanas con cualquier atuendo, nunca ha tenido tantas transformaciones como ahora.

Micro manicura francesa: una cuestión de milímetros

Una base natural -que resalta el color del bisel- y una punta blanca: la micro manicura francesa es el nail art más sobrio, perfecto para las amantes del minimalismo. Lo que la diferencia de la histórica manicura inventada en los años 70 (y que se hizo viral a principios de los 2000) son los milímetros. La finísima línea de esmalte que decora la uña debe ser de dos o tres milímetros como máximo. Una línea que se perfila en el borde superior de la uña y que crea un contraste con el lecho ungueal que se deja neutro o transparente, o rosa claro, más lechoso. Los beneficios son evidentes. La micro manicura francesa multiplica la capacidad de hacer que los dedos de la mano parezcan más elegantes. Cuanto más fina sea la línea, más se estrechan los dedos. Según las expertas, el efecto más notable se produce en las uñas cortas y de longitud media, pues la manicura francesa extrapequeña alarga ópticamente no sólo la uña en sí, sino también la mano, con un resultado extremadamente sofisticado.

Cómo crear una mini manicura francesa

Alisar los largos y eliminar las cutículas son los primeros pasos para crear una mini manicura francesa. El siguiente paso es aplicar un esmalte neutro por toda la base y, una vez que se haya secado, utilizar un pincel para hacer finas líneas en el borde superior de la uña. Se parecen mucho a las caritas sonrientes. Este proceso, perfecto para quienes tienen una mano firme, puede realizarse tanto con esmaltes semipermanentes como con esmaltes normales. Ahora bien, existen herramientas que hacen de este proceso uno mucho más fácil. Consiste en impregnar de esmalte un nail stamper o kit de estampado de silicona y clavarlo sobre la uña como vemos en el video, profundizando más o menos en función del grosor que busquemos, en este caso, muy mini. Este producto lo venden en Amazon o Mercado Libre, es low-cost y definitivamente cambia por completo los tiempos y las formas en las que nos hacemos la manicura francesa, si lo tuyo hacértela en casa.

En Europa y Estados Unidos que están en plena primavera, los colores fluorescentes y pop son la tendencia para esta micro manicura francesa. Para nosotros, la versión neutra, negro o en colores pastel son perfectas tonalidades para uñas otoñales. En una infinita variedad de tonos y acabados. Desde los más brillantes hasta los metálicos. Se pueden crean reinterpretaciones muy lúdicas de la manicura francesa.

Manicura francesa al revés: mini elegancia al revés.

Algunas tendencias están dando la vuelta a la sonrisa de la micro manicura francesa, como hacerla a la inversa. Un nail art que invierte los códigos y es súper divertido. El borde se dibuja en la base de la uña, cerca de las cutículas. Para hacerlo mini, solo basta con reducir el tamaño de la punta de color.

clear
TOP