CELEBRAMOS EL CUMPLEAÑOS Nº 64 DE LA SIEMPRE ELEGANTE PRINCESA CAROLINA DE MóNACO RECORDANDO 21 DE SUS MEJORES MOMENTOS DE LA MODA A LO LARGO DEL TIEMPO.
Por Francisca Vives K / @franvivesk
23/01/2021
La princesa Carolina generalmente permanece fuera del centro de atención y rara vez habla con la prensa, pero su filantropía, elegancia y sentido de la moda hablan más que las palabras. Es conocida por el público como una realeza con estilo, aplomo y generosidad. A través de los altibajos de la vida, ha tenido la responsabilidad y el sentido del deber de dar prioridad a sus asociaciones humanitarias, su familia y sus hijos. Y en materia de estilismos, sin duda que Carolina Louisa Margarita Grimaldi, la mayor de las hijas de Grace Kelly y Rainiero III, nació para ser un icono de la moda. En su cumpleaños 64 revisamos 20 vestidos íconos de su vida como princesa.
DE NOVIA CON con PHILIPE JUNOT (1978)
Carolina de Mónaco escogió el vestido de novia con más repercusión de su trayectoria: un dos piezas con flores bordadas y estética boho, firmado por Christian Dior. De hecho, su propia hija, Carlota Casiraghi, rendiría homenaje a aquel diseño casi cuatro décadas después, en su matrimonio con Dimitri Rassam.
Baile de la Rosa 1983
En 1982 la legendaria Grace kelly murió trágicamente en un accidente automovilístico. De esta manera su hija Carolina tomaba el relevo en actos oficiales junto a su padre. Fue así que por primera vez en 1983, se impuso al frente de la cita que anuncia todos los años la primavera y que reúne a aristócratas y millonarios. Para ello lució un hermoso vestido blanco de escote asimétrico y guantes largos.
BAILE DE LA ROSA 1985
Siempre elegante, jamás aburrida. Para esta ocasión utilizó un strapless blanco estampado con un belleza diadema de brillantes, collar de piedras preciosas, un bronceado divino y ochenteras sombras moradas para sus ojos.
NOCHE DE ESPECTÁCULOS (1984)
Un año después de casarse por segunda vez, esta vez com el que se dice fue el gran amor de su vida, Stefano Casiraghi, la vemos junto a él en una gran noche saliendo de un concierto de Frank Sinatra. Su vestido verde esmeralda con grafismos negros, su pelo rizado y el flequillo liso que todas querían.
BAILE DE LA ROSA 1988
El tradicional baile monagesco se convirtió en el mejor marco para sus elegantes atuendos de gala. Aquí, espléndida con un strapless de seda roja y larguísimos guantes negros.
su último baile con stefano casiraghi (1989)
Era una bella noche de primavera en la que Carolina de Mónaco se vistió fabulosamente con un vestido color turquesa y detalles dorados que lució con enormes aros. No imaginaba que sería su último baile con su marido Stefano Casiraghi quien murió en un accidente en las aguas de Saint-Jean-Cap-Ferrat, la península privilegiada entre Cannes, Montecarlo y Niza en 1990. Con Stefano Carolina tuvo tres hijos: Pierre, Andrea y Carlota
para recibir el nuevo milenio (2000)
Cuatro años antes de comenzar el nuevo siglo Carolina se convirtió en la princesa de Hannover al casarse por tercera vez con el príncipe Ernesto. Para celebrar el nuevo milenio su look comenzó a variar en elegancia. De esta manera en el Primer baile de la Roosa del siglo, lució este espectacular vestido a rayas terminado en una falda de flecos-plumas de Jean Paul Gaultier.
Boda reales: su especialidad (2004)
Además de los tradicionales Bailes de la Rosa, Carolina se ha destacado siempre por la distinción que imprime en sus outfits para bodas reales. Para el enlace entre el príncipe heredero Federico de Dinamarca y la abogada australiana Mary Donaldson, celebrada en la catedral de Copenhage en mayo de 2004 lució un bellísimo vestido de inspiración lencera en azul noche y una fabulosa tiara de diamantes.
Escote de vértigo (2004)
Hay pocas mujeres que pueden llevar un escote así y defenderlo con tanta clase. Las elecciones de Carolina son siempre notables porque en ellas constantemente la princesa les imprime drama y riesgo con una distinción que sólo ella sabe hacerlo. En la cena de gala previa a la boda de Federico de Dinamarca y Mary Donaldson, Carolina lució este vestido dorado y asimétrico con un escote atrevidamente pronunciado para una cita de este estilo. Lo llevó con la tiara floral del siglo XIX de platino y diamantes que la madre de Christian de Hannover, Chantal Hochuli, la primera mujer de Ernesto, solía llevar en cenas de gala y otros acontecimientos de la realeza. Después la han llevado Ekaterina Malysheva y Alessandra de Osma, en sus respectivas bodas Hannover.
chanel en madrid (2004)
Fue en la recepción de Felipe y Letizia, en la víspera de su boda. que Carolina de Mónaco llegó con su marido Ernesto de Hannover y un sensacional vestido de alta costura de Chanel, con mangas abullonadas y falda larga. En la ceremonia del día siguiente, celebrada en la catedral de la Almudena de Madrid el 22 de mayo de 2004, Carolina volvió a elegir un elegante traje de la colección de Alta Costura de Chanel,
de gala en versalles (2010)
En 2010, el Palacio de Versalles se vistió de gala para albergar la XVIII edición de la Noche de la Infancia a la que Carolina de Mónaco asistió con un encantador vestido largo en color gris perla de inspiración griega, convirtiéndose en la auténtica protagonista de la fiesta organizada por la ex primera dama francesa, Anne-Aymone Giscard d´Estaing, presidenta de Children´s Fundation.
la invitada más elegante (2012)
Separada de manera extraoficial de su marido Ernesto de Hannover desde 2009, Carolina llegaba sola y espléndida a la cena de gala de la boda del príncipe Guillermo de Luxemburgo (el último heredero de Europa en casarse) y Stephanie de Lannoy (condesa belga), celebrada en el Hotel De Ville de Luxemburgo el 19 de octubre de 2012. Una vez más, fue pura elegancia con este vestido azul noche y majestuosas joyas de diamantes.
baile de la rosa 2013
En 2013 Charlene de Mónaco, esposa del príncipe Alberto presidía su segundo Baile de la Rosa, pero aquel elegantísimo Chanel blanco con hombros al descubierto y ribetes negros que llevaba Carolina ciertamente eclipsó a la anfitriona evidenciando el glamour monagesco que sólo ella sabe como llevar.
para la boda de su hijo (2015)
No era una ocasión menor. Su hijo Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo se casaban en Angera (Italia), en el verano de 2015 y para ellos Carolina escogió este Chanel largo cuajado de lentejuelas en azul noche y rosa que combinó con mangas semitransparentes.Todo un acierto sin duda.
BAILE DE LA ROSA 2015
Para homenajear los años 20 del tradicional baile que da inicio a la primavera, Carolina escogió este vestido de satín en color champán con inspiración lencera, diseñado por Karl Lagerfeld. A punto de cumplir los 60, solo ella podría defenderlo con tanta elegancia. El modelo ha servido de inspiración a numerosas novias en los últimos años.
baile de la rosa 2017
Del brazo de su gran amigo, modista y confidente Karl Lagerfeld, en 2017 se dejó aconsejar con este vestido de enormes mangas farol y estampado en blanco y negro. Una nueva elección llena de teatralidad, perfecta para el tradicional Baile de la Rosa.
Vaporoso en tono salmón (2018)
Diseñado por Karl Lagerfeld para Chanel, era puro chic.Largo, vaporoso en tres capas color salmón. Tan increíblemente inspirador que marcas low cost de la época no dudaron en replicarlo.
día nacional de mónaco 2018
De rojo intenso, con un vestido largo y con capa, celebraba el día nacional de Mónaco con toda la prestancia que este exige. A sus pies, unas sandalias de Christian Louboutin, su amigo y zapatero de confianza. Su amistad es tan poderosa que ha sido él el sucesor de Karl Lagerfeld como director creativo del Baile de la Rosa.
gala ‘Lights of gaming’ (2018)
Carolina de Mónaco tiene esa increíble capacidad de trascender y deshacer todo lo que siempre hemos pensado de las lentejuelas. A sus 61 años lucía fabulosa y elegantísima en la gala ‘Lights of gaming’ celebrada en Mónaco con este diseño negro, largo y de escote en v.
gala ‘secret games’ (2019)
¿Plumas y transparencias a los 62? Nadie más que ella sabe lucirlas con la elegancia y distinción Así lo demostró en la gala ‘Secret Games’ celebrada en Montecarlo en 2019 con este vestido que bien podría desear una actriz para los Oscar.
el último baile de la rosa antes del covid (2019)
El primero sin su adorado Karl Lagerfeld y el último antes que apareciera el coronavirus en todo el mundo. Sin saberlo aún, Carolina, siguiendo lo dispuesto por Grace Kelly desde la inauguración del baile de Rosa: decorar con miles de rosas el Salón de las Estrellas del Sporting club de Montecarlo.siempre hizo honor a su madre, bien llevando un pequeño bouquet con flores, o como en esta ocasión, luciendo un diseño de Chanel en negro con una gran cascada floral rosa.
