Un ingrediente clave en los tratamientos ayurvédicos desde tiempos inmemoriales.
Por Francisca Vives K. / @franvivesk
El amla es una planta que crece en la India, de ahí su inclusión natural -hace varios milenios- en las recetas curativas de la tradición ayurvédica. ¿Qué ha hecho que tenga tanto éxito en el pasado y en la actualidad? También conocida como la grosella india, la amla (Phyllantus Emblika officinalis) es una fruta pequeña de sabor amargo que se utiliza en una variedad de preparaciones saludables, desde polvos hasta tinturas. De color verde claro, el amla contiene un conjunto de valiosos nutrientes, como vitamina C, quercetina, aminoácidos, pectina y polifenoles ricos en antioxidantes, como los taninos y el ácido gálico.
Se consiera un potente antioxidante, que tiene propiedades antiinflamatorias, antifúngicas y antibacterianas, y también ayuda al sistema inmunitario. Utilizado en fórmulas para el cuidado de la piel, así como en productos para el cuidado del cabello, el amla tiene un efecto beneficioso integral, mejorando la vitalidad de la piel y el pelo, sin mencionar su efecto defensivo contra los radicales libres. Y ha sido desde la antigüedad que las mujeres indias han preparado aceites y envolturas regeneradoras a base de amla para aplicarlas su cuerpo.
El redescubrimiento del ayurveda aplicado a la belleza y el bienestar
Como explica Sandra Nassima, fundadora de Depuravita, “la investigación en medicina ayurvédica es más valiosa que nunca para quienes, en 2022, quieren tratarse de forma segura y natural. Basta ver el redescubrimiento de las plantas adaptógenas, que son esenciales para apoyar al cuerpo en tiempos de estrés, con beneficios para la mente y el cuerpo. Van desde el tulsi, una planta que se cosecha para las curas ayurvédicas desde hace más de cinco siglos, prescrita por su efecto tonificante, antiinflamatorio y antioxidante, hasta la ashwagandha, o ginseng indio, que puede reducir tanto los niveles de azúcar como de cortisol en la sangre. Una de las lecciones que el Ayurveda y su familia de ingredientes naturales nos ofrecen, demostrando su relevancia, es que un cuerpo sano se corresponde necesariamente con un aspecto vital y bello. Como si dijera: hay algo más que la clásica crema. El consejo, por tanto, es no limitarse sólo al cuidado de la piel, sino cuidar al máximo la dieta y el estilo de vida de forma integral. Quizás redescubriendo el Ayurveda y sus mágicos ingredientes verdes”.
¿Cómo tomar amla?
Los frutos del Amla son perfectamente comestibles, aunque tienen un sabor muy ácido y amargo. En la India es costumbre cocinarlos en agua salada y polvos de cúrcuma para hacerlos más apetecibles.
El fruto deshidratado y en polvo.
Las hojas secas para infusión.
Cápsulas y comprimidos.
