Después de semanas de especulaciones y rumores que recorrían los pasillos de la industria de la moda, Balenciaga lo ha confirmado: Pierpaolo Piccioli, el reconocido diseñador que durante casi dos décadas redefinió el romanticismo en Valentino, es el nuevo director creativo de la maison fundada por Cristóbal Balenciaga.
La noticia llega en medio de un inusual movimiento de fichas entre tres grandes casas de lujo: Piccioli pasa de Valentino a Balenciaga, Demna abandona esta última para aterrizar en Gucci, y Alessandro Michele, exGucci, ocupa ahora el lugar de Piccioli en Valentino. Un auténtico triángulo de talento que marca un cambio de época en las altas esferas del diseño.
La llegada de Piccioli a Balenciaga representa un giro interesante para la firma, históricamente asociada a una estética vanguardista y provocadora bajo la dirección de Demna. Con un enfoque diametralmente opuesto, Piccioli se ha destacado por su elegancia poética, su uso expresivo del color y su habilidad para conjugar tradición e innovación sin perder la sensibilidad humana que ha caracterizado sus colecciones más aclamadas.
“Estoy entusiasmado de comenzar esta nueva etapa junto a Pierpaolo. Su sensibilidad artística encarna perfectamente el espíritu de Balenciaga: audaz, sofisticado y profundamente conectado a la herencia de la casa”, declaró Gianfranco Gianangeli, CEO de Balenciaga, en el anuncio oficial.
El propio Piccioli compartió una emotiva carta en la que expresó su entusiasmo por asumir este nuevo desafío y agradeció públicamente a Demna, a quien definió como una fuente de inspiración. “Admiro profundamente su visión. Este relevo creativo es un honor que asumo con gratitud y respeto”, señaló el diseñador italiano.
Aún no hay fecha confirmada para el debut de Piccioli en la pasarela de Balenciaga, pero las expectativas ya están por las nubes. ¿Veremos una Balenciaga más romántica, menos disruptiva? ¿O será Piccioli quien se atreva a romper sus propios esquemas y sorprender con una reinvención total?
Lo que está claro es que la moda está viviendo una reconfiguración profunda, y Balenciaga, con Piccioli al mando, promete escribir un nuevo capítulo que ya despierta curiosidad, nostalgia y entusiasmo en partes iguales.
CARTA DE PIERPAOLO PICCIOLI
Cada nueva historia tiene mucho que ver con el camino que nos llevó hasta allí, con los seres humanos que somos ahora y con las experiencias que ya hemos vivido.
No soy muy fan de la predestinación, pero mientras revisaba mi página personal de Instagram, me di cuenta de que la primera foto que subí fue el conjunto de boda de 1967 de Cristóbal Balenciaga.
No sé si debería tomarlo como una señal, lo que sí sé es que ahora puedo ver el panorama completo.
Estar aquí hoy, para moldear una nueva historia de una casa donde la creatividad siempre ha sido una cultura y la innovación una ciencia, me hace sentir honrado y orgulloso de continuar la historia que quienes vinieron antes que yo ya contaron con respeto y puntos de vista firmes.
Balenciaga es lo que es hoy gracias a todas las personas que han abierto camino.
Cristóbal, Nicolas, Alex, Demna.
En todas sus fases, mientras evolucionaba y cambiaba constantemente, nunca perdió de vista los valores estéticos de la Casa.
El legado y archivo de Cristóbal Balenciaga es probablemente una de las declaraciones de moda más influyentes de todos los tiempos.
Él lo hizo todo antes que los demás; literalmente inventó la cultura de la creatividad; impregnó la idea de la alta costura en cada aspecto de su carrera, y mostró, a través de sus creaciones, el poder de la evolución y la innovación.
Lo que recibo hoy es una marca llena de posibilidades que resulta increíblemente fascinante.
Ante todo, debo agradecer a Demna; siempre he admirado su talento y visión. No podría haber pedido un mejor traspaso de antorcha.
Él rindió homenaje a Cristóbal a su manera, compartiendo su punto de vista mientras mantenía viva la identidad central de la Casa.
Esto me da la oportunidad de dar forma a una nueva versión de la maison, añadiendo otro capítulo con una nueva historia. Mi capítulo en la Casa Balenciaga.
Estoy agradecido por la confianza que me brindan François-Henri, Francesca y Gianfranco. Desde el principio estuvimos en total sintonía, y esa es la mejor manera de comenzar algo nuevo.
El trabajo lo hacen las personas, y la manera en que las personas se sienten dentro del trabajo es lo único que importa.
Me siento bien, bendecido, agradecido y honrado de estar aquí, ahora.
Gracias,
Pp
