Antes de cumplir 80 años, la actriz icono de Hollywood confesó en una revista que pensaba que a esa edad estaría solo dedicada a la jardinería. Creía que tener ocho décadas de vida le impediría hacer algo más. Pero no pudo estar más lejos de la realidad.
Jane Fonda volvió de lleno al activismo, algo que la ha acompañado durante toda su carrera. Fue una ferviente opositora a la Guerra de Vietnam y también ha apoyado fuertemente distintas causas como el resguardo de los derechos de los nativos americanos.
Su nueva lucha es contra el cambio climático y eso la tiene cada viernes, junto a otras celebridades y a decenas de hombres y mujeres, muchos de la tercera edad, en el vestíbulo del Senado protestando por lo que califican como una inmovilidad política en la tramitación de inicitaivas legales como el Green New Deal que tiene como objetivo cambiar los combustibles fósiles contaminantes en energías renovables.
Desde hace un mes, cada semana, además, la actriz termina siendo esposada y arrestada por la policía, algo queparece no importarle ya que son esos los momentos en que aprovechando la presencia de los medios de comunicación, lanza fuertes llamados a unirse a la causa. “Es la manera en que uso mi celebridad para difundir el mensaje de que enfrentamos una crisis que afecta directamente a nuestros hijos y nuestros nietos” o “a los jóvenes les digo que se unan a las manifestaciones con sus compañeros, o con nosotras, las abuelas”, han sido algunas de las frases de la ganadora de dos premios Oscar.
Jane Fonda dice que su lucha no tendrá tregua y que seguirá cada semana manifestándose. “¿Una noche en la cárcel? Gran cosa…”, ha señalado en más de una oportunidad.
